viernes, 7 de septiembre de 2012

Pedals d'Occitània 2012 - Etapa 1/3

La Etapa
Vielha-Gaussac-Aubèrt-Arròs-Vilamós-Arres De Sus-Bossòst-Saint Mamet-Bagnères de Luchon-Luchon-St. Aventin-Benque-Cirès


Datos de Interés
68Km.
2463m. de desnivel positivo acumulado.
4h34m
14,78Km/h de velocidad media.
Índice IBP: 159


Perfil de la Etapa










La Crónica
A las 07:15 ya hacía un buen rato que el alboroto presidía el improvisado "Macotel" en Escunhau. Como siempre en esta zona de nuestra geografía, las mañanas fresquitas invitan a coger más ropa de la cuenta, pero todo apuntaba a que la jornada sería calurosa. De hecho, se presentaba un fin de semana de calor sofocante, salvo el sábado, en el que todas las predicciones vaticinaban lluvia.
Debidamente no-uniformados, con los camelbaks bien pertrechados y con el equipaje de tres personas dividido en dos bultos (por aquello de ahorrarnos 70 eurazos en el transporte de equipaje), bajamos a desayunar, no sin antes cargar los equipajes que mi padre tendrá que llevar a las 10:00 a Pedals de Foc para que nos los lleven hasta el albergue Le Grata Pes de Cirés, pueblecito donde pernoctaremos la primera noche.

Tostadas con mantequilla, todos los sabores imaginables de mermelada, embutido de la región, patés y café, fue lo que mi madre entendió por un desayuno "light".
Tras atacar sin piedad las exquisitas viandas, por fin, cuando están a punto de dar las 08:00, nos despedimos de mis padres y enfilamos los 3Km. que nos separan de Vielha y nos dirigimos a la oficina de Pedals de Foc para iniciar la aventura, no sin antes hacer la parada obligatoria a llenar los depósitos con la gélida agua que nos ofrece la mítica fuente del pueblo.

Imposible tocar el agua mucho rato...

No hemos dado ni una pedalada, cuando surge el primer problema... El GPS de Nando le sitúa en... ¡¡¡Terrassa!!!. Se inician las conversaciones/negociaciones de Nando con el aparatito. Tras 10 minutos de reloj, Nando se da finalmente por vencido: "Yo lo pongo a grabar y a tomar por culo..."

Nando peleando con el GPS
Sabíamos que la primera era la jornada más dura, pero también era la que estábamos más frescos. Tras llegar a la rotonda de entrada/salida de Vielha, enfilamos las primeras rampas duras en dirección a Gaussac.
Subida por asfalto y carretera de curvas para ir entrando en calor. Llevamos poco más de 1Km. de ruta y ya vamos con la lengua fuera, jojojojo. Esto sí que es empezar a lo grande.

Nando y Coppi "coronando" Gaussac
Seguimos en dirección a la Bassa d'Oles y cuando pasamos el Pla Batalher, abandonamos por fin la pista asfaltada y nos adentramos en el primer sendero del día. Sendero estrechito que empieza fácil y que en su parte final se torna un poco más técnico, por la aparición de piedra suelta y algún que otro escalón. 
Fran ya hace tiempo que se ha fusionado con su bicicleta y baja encendido y disfrutando al máximo del descenso. Nando hace relativamente poco que sale con su flamante 29 y se lo toma con un poco más de calma. No arriesga e incluso se furrea cuando no lo ve del todo claro. Coppino por su parte, estrena bici para la ocasión y digamos que, como "aun no le tiene tomada las medidas" a su novia, opta por la sabia decisión de ir a su ritmo.
Una vez retomada la pista principal, reagrupación y cruzamos el puente que nos lleva a Aubèrt.
 
La naturaleza empieza a rodearnos...
Cruzamos la N-230 e iniciamos la subida a Arròs, para seguir subiendo en dirección al terrorífico Saut deth Pish. Destacar que esta primera parte de la ruta hasta llegar a Bossost, comparte buena parte del recorrido del Defí Occitan, otra sensacional ruta para amantes de los calentones en bicicleta, en este caso, de carretera.
Volviendo a la subida al Saut deth Pish, os invito a que analicéis detenidamente el cartelito de inicio de puerto...

Me río yo del Marie Blanque ese...
Afortunadamente, tras los primeros 3Km. de subida por carretera y superada ya la Palanca de Dessús, nos metemos por pista de tierra en dirección a Vilamós. Pista ancha con buen porcentaje, pero se puede rodar bien y mantener un pedaleo constante, eso sí, cada uno al ritmo que se siente cómodo. Así, Nando y Fran van a ritmos parejos, mientras que Coppino prefiere mantenerse siempre a cierta distancia, pero a la vista.

Desviándonos de la ruta en busca de la foto...
En Vilamós paramos a beber agua, sabiendo que ya queda poco para completar la primera subida "real" del día. El día aun no ha despuntado del todo, la niebla sigue presente y en esta zona, los paisajes empiezan ya a dejarnos sin palabras...

La neblina otorgándole un aspecto místico a las cumbres

Epi, Blas y la Mafia, bien avenidos...

Los escasos dos kilómetros que nos separan de Arres de Sus, son el claro ejemplo de carretera estrecha, curvas reviradas y porcentajes elevados. Recuerdo haberme retorcido por esta misma carretera con la flaca el verano pasado y sin embargo, con la btt, el pedaleo es mucho más alegre.

La bajada hasta Bossost es velocísima, sin embargo la carretera no permite ningún tipo de confianza, debido a múltiples baches, gravilla, etc. De nuevo, recuerdo lo acojonado que iba el año pasado bajando por aquí con la flaca... El descenso es como bajar por un tobogán, las curvas son cerradísimas y al mínimo descuido o "envalentonamiento", la excursión al pasto está asegurada.
En mitad de la bajada, Nando va flojo de atrás (en todos los aspectos) y tras hinchar para intentar llegar abajo, la cosa no sale bien y tenemos que parar a cambiar la cámara. Coppino está ya hasta las pelotas de tantos contratiempos y a punto está de hacer una locura...

Coppino, a punto de ajusticiar al desgraciado...

Resuelto el percance y tras pasarnos de largo el sendero correcto, damos la vuelta y bajamos echufados hasta Bossost. Aquí se produce un momento "Dimensió Desconeguda" en el que, de repente, Coppino y yo nos giramos y vemos que Nando ha desaparecido. Es complicado perderse en un pueblo formado por una única calle, pero el nivel de pericia de Nando no tiene límites. Decidimos ir por esa única calle hasta la rotonda de inicio de ascenso al Portilhon a esperarle. Cuando estamos a punto de llamar a los Mossos, aparece Nando por... ¡¡¡carretera!!! dando unas explicaciones que bueno... Que no explican nada en absoluto.
La subida al Portilhon consta de una primera fase de casi 5Km. por carretera, para luego hacer 8Km. más ya por pista. Decidimos, lógicamente, que cada uno haga esos primeros 5Km. a su ritmo y reagruparnos en la curva del mirador, donde ya cogemos la pista de tierra. 
5 km. exigentes en los que adelantamos con un tío que va con la btt hasta las trancas. Alforjas atrás, petate delantero en el lado izquierdo y mochilón a la espalda. El tío no va a más 6-8Km/h y pegando unos chepazos que asustan al miedo, pero no para, va haciendo camino. Impresionante. 
A destacar la curva de derechas justo a la altura del mirador, de lo más duro de toda la subida. Observad en la siguiente imagen, la bici del tío que os comentaba antes...

Coppino superando el tramo más duro.
Una vez reagrupados, comemos tranquilamente unas barritas y seguimos adelante.
La pista nos lleva por un frondoso bosque que hace que siempre podamos aprovechar la sombra que nos ofrece. El principio de la pista nos recibe con rampas exigentes y tramos de verdadera dureza, hasta llegar al siguiente desvío.

Acabando de ganar altura
Aquí ya la cosa suaviza bastante, se pedalea muy fácil y me recuerda a la zona del Troncó, que siempre pica hacia arriba, pero que se puede hacer a muy buen ritmo. Digamos que ya estamos a la altura de la cima del Portilhon y ahora hay que llanear hasta empalmar con la subida por carretera, lugar donde pasaremos ya a territorio francés.

Como veis, pista ancha y bien protegidos
Por fin, a punto de entrar en Francia
Primer tramo de descenso por carretera, asfalto en perfecto estado y donde se puede ir muy rápido, pero también con precaución ya que, de nuevo, las curvas cerradas están a la orden del día. Tras 3,5Km., abandonamos definitivamente el asfalto y entramos de nuevo en pista ancha de tierra. Cuando pensamos que todo será bajada hasta Luchon, la ruta nos sorprende y nos mete por una pared de kilómetro y medio que vuelve a dejarnos sin aliento. Aquí, me cubro de gloria, por no decir otra cosa y lanzo por esa bocaza que tengo, una de las frases de la Pedals: "Supongo que la gente calificará esta ruta como más "técnica" porque las subidas son más complicadas y con un poco de piedra suelta..."  
Bien, chaval, bien. Justo al finalizar la subida que os estaba comentando, pasamos al lado oscuro...
A partir de ese momento, senderos de todo tipo, tanto de subida como de bajada, escasez de pista ancha, días que se hacen de noche, vegetación como nunca antes había visto, verde por todas partes, sensación de humedad, olor a bosque...

Como pistoletazo de salida, una bajada sin aprente complicación pero con una pendiente tal, que hace que Nando y Coppi se bajen de la bici.

Lástima que la foto no refleje la realidad...
Allá va el Mafias...
Tras este primer aperitivo, viene uno de los platos fuertes del día. Un sendero de unos 3Km. realmente alucinante. Mucha piedra suelta y una sucesión de curvas peraltadas cerradísimas súper divertido. Fran definitivamente va con el Kamikaze Mode Activated y baja a gran velocidad, disfrutando como un enano. Nando le sigue la rueda, pero en un tramo especialmente delicado... Nando vuelve a ser protagonista...
Rueda delantera que hace un extraño, recepción descontrolada y... ¡¡¡Primer billetaco!!!
Nando se levanta de inmediato asegurando que "Estoy perfectamente, solo ha sido un pequeño golpe."
El pequeño golpe, sin embargo, le ha partido el soporte del Road Book.

A tomar por culo el Road Book
El pequeño golpe, a su vez, tiene más misterio que la bala que mató a JFK. ¿Cómo es posible que un "pequeño golpe" le deje secuelas tales como un soporte de road book partido por la mitad, un moratón en el muslo, otro en la tibia, rascadas en el codo,  movilidad reducida en una mano y maleza en el casco?
Di la verdad de una vez por todas: ¿Hubo voltereta? ¿Croqueta, quizás? ¿Te gustaste mientras ibas por el aire e intentaste un rectificado imposible?

Esto es un no parar

Este tramo se bajaba a toda hostia

Tramo de curvas peraltadas MUY inclinado
El sendero nos deja a los pies de Saint Mamet, pueblecito donde acaba el descenso del Portilhon, con la sensación de subidón... Llevamos los tres un careto de felicidad que parecemos gilipollas.
Pasamos Bagnères de Luchon y hacemos nuestra entrada triunfal a Luchon, lugar donde sellaremos por primera vez y pararemos a comer. Aunque son poco más de las 12:00, el descuadre de horarios no se nota en absoluto y disfrutamos de un buen menú.

"Potage", "Confit" y "Pression"... ¡¡¡Brutal!!!

El Mafias, regaladísimo...
Antes del menú, hay que refrescarse y qué mejor que una buena cerveza... Y aquí es donde encontramos uno de los mayores handicap de la ruta... La cerveza ... Y sus precios. Tres euros nos soplaron por una mísera caña de Leffe (asquerosa, por cierto). Ni que decir tiene que fue la primera y la última cerveza que nos bebimos. Mención especial también al hijo mayor de la pareja de irlandeses que comieron a nuestro lado. Un auténtico destructor. Tras pasarse toda la comida tentando a la suerte con el vaso de zumo en el canto de la mesa, fue finalizar de comer e iniciar un proceso de aniquilación de ceniceros. Uno se lo cargó, otro resistió el lanzamiento al suelo y un tercero salvó milagrosamente el pescuezo cuando le fue arrebatado por su madre en el momento que procedía a su intento de ensayo.  

Tras la comida, tran solo 14Km. por delante. Esto está chupado, pensamos...
¡¡¡ERROR!!! Nunca subestiméis 14Km. en BTT.

En efecto, con la panza llena y con una buena solanera, abandonamos Luchon y nos vamos en dirección a Arreau y Bourg d'Oueil. Superamos una central eléctrica y es coger la pista a la izquierda y empezar 3Km. de subida por un sendero de piedra suelta, que hace que el confit d'ànec empiece a asomar por la garganta... Encima, en lugar de pasar por una pasarela como claramente indica el libro de ruta, nos vamos hacia la izquierda, lo cual nos "regala" unos 400 metros de retortijones al 18%, para luego ver lastimosamente cómo nos estamos alejando del track que marca el Garmin. Total, que media vuelta y a seguir.

Llegados a este punto, no puedo demorar más el tema ni seguir ocultando información.
¡¡¡Coppino es un inútil!!! El tío siguiendo el libro de ruta iba más feliz que un niño con zapatos nuevos.
Ahora bien... Tiene ENORMES problemas para distinguir entre "derecha" e "izquierda".
El cabrón no da una. Si el libro marca "izquierda", él canta "derecha" y viceversa. Es más, marca con el brazo una dirección y dice otra.
Ante la pañolada que le dedicamos, se para, nos mira a los ojos y nos da la siguiente explicación: "Es que no sé decir 'derecha'"
Ahhhhhhhhhh, hombre haberlo dicho antes. Ahora ya está todo aclarado, joder.

Seguimos por un sendero en el que el molinillo nos salva la vida y nos cruzamos con un tipo en bicicleta de enduro (lo cual nos da mala espina por lo que podemos encontrarnos más adelante).
Efectivamente, estamos en terreno mega-destructor. O lo haces andando o tiras de orgullo e intentas subir montado a costa de que las piernas te exploten y las pulsaciones se vayan por las nubes.

¿Por qué las fotos nunca reflejan la verdadera dureza?
Todo este terreno rompepiernas va haciendo mella y la puntilla la pone el siguiente tramo de escalones.
Fijaos en la cara del pobre Coppino...

¡Qué clase subiendo escalones!

¿Quién ha dicho que las fotos no reflejan dureza?

Impresionante... Llevamos 5Km. desde que hemos reiniciado la ruta y vamos ya "ben cuits" y pidiendo la hora...
El kilómetro de descenso hasta St. Aventin es un mero espejismo. Eso sí, aprovechamos para casi bañarnos en una fuente y disfrutar del paisaje.

Bajadita y sendero...
Repostando...

Las vistas seguían siendo magníficas...

Estábamos a 9Km. del final de etapa y la cosa no tenía visos de mejora. Aunque lo peor ya había pasado, cualquier subida cañera ya costaba una barbaridad. Todos íbamos con el depósito en reserva y con las luces del salpicadero parpadeando enloquecidamente.

Último sendero antes de Cirés, en la escapada buena...
Con Cirés a la vista, cambia el talante y nos venimos arriba. Incluso en la última rampa antes de llegar al pueblo, Nando lanza un ataque sorpresa (el primero de los tres que lanzó) al que reacciono tarde y que hace que todo se decida en un ajustadísimo sprint del que no queda claro quién sale vencedor (No, Nando, no queda claro, por mucho que te encabrones...)

Cirés, con su iglesia en lo más alto...
Siguiente paso: Localizar el albergue.
Una vez localizado y tras las pertinentes presentaciones con la casera, lavamos las bicis, perdón, asaltamos la nevera, damos buena cuenta de unas latas de cerveza que nos supieron a gloria y ahora sí, lavamos las bicis. Duchita y paseo por el pueblo, y a hacer tiempo hasta las 19:00, que es la hora que tienen los franceses de cenar.
Del pueblo, poco que comentar. Clásico pueblo de montaña, acogedor, sin cobertura telefónica y punto de paso del Tour de este año. Y como no, nos tocó el vecino que era un crack.
Según Nando, un cuarentón (luego nos confesó que tenía 64 tacos) que ya lo tenía todo hecho en la vida y que se dedicaba a hacerse amigo de los turistas. Total, que el vecino en cuestión nos empezó a hablar de lo que nos encontraríamos al día siguiente subiendo Balés e incluso nos dijo que igual hasta nos acompañaba un rato...

Nando haciendo amigos...

Fijaos en el curioso corte de los árboles...

A punto de cenar a plena luz...
La cena daría para un capítulo aparte...
Entramos de día y salimos de noche. Más de dos horas cenando, señores...
La camarera, una loca... Mademoisselle, ¿cómo se te ocurre decir en presencia de Macos, que tu ilusión es ir a Barcelona a pasar una temporadita? Y hasta ahí puedo leer...

Salimos del restaurante pasadas las 21:30 y nuevamente, lo dejamos todo preparado para que al día siguiente solo tuviéramos que almorzar y empezar a dar pedales.
Haber superado la dura etapa de hoy, aun no le daba garantías a Coppino de poder superar lo que nos quedaba por delante, que de entrada era una etapa de 90Km.
Y como veremos en la siguiente entrada de esta crónica, cualquier circunstancia desfavorable es susceptible de empeorar... Como así pasó...

Y del albergue, pues la verdad es que muy bien. Camas muy confortables y todo muy limpio y muy nuevo.
Además de las mantas, nos proporcionaron un elemento de última generación cuya utilización requiere alto nivel de estudios... Una funda. El mecanismo es simple. La despliegas y te metes dentro. No tiene pérdida. Abierta por un lado y cerrada por el otro... Todo muy fácil, ¿no?
Pues mirad a Coppino, que casi se lesiona...

A punto de ahogarse con la maldita funda...
Ni que decir tiene que fue apagar la luz y caer los tres como moscas, a la espera de la jornada del día siguiente, preñada de alicientes y que prometía momentos inolvidables como los que ya nos llevábamos entre pecho y espalda.
Efectivamente, iba a ser una jornada para recordar y que nunca olvidaremos.

7 comentarios:

tete de la course dijo...

fran eres un crac nen!!me dan ganas de cojer la burra y todo!!!fotos muy guapas y los senderos tambien.

Señores carreteros salida para el domingo.
LUGAR:les pintures
HORA:7:40
RUTA:del bacalao (piscinas)

PD:no falteis campeones.

Unknown dijo...

Martes 7.45.pinturas. para celebrar diada con almuerzo

David G dijo...

Hola, el arbergue de Cirés se llama Les Grata Pes? Es que queremos hacer la pedals d'occitania a finales de mes y si me dices que esta muy bien iremos a ese sitio.
La cena y el desayuno bien?

Unknown dijo...

7.30 al final

Víctor dijo...

La ruta prevista para mañana: Terrassa-San Lo-granera-Moia-Seva-Tona-collformic-Sta maria palau tordera-Hostalric-Blanes-tordera-granollers-caldes-terassa.

Rutita suave para celebrar la diada como dios manda

Vendi dijo...

Quina pasada de ruta!!! L'any passat no la coneixia pero aquest estiu he tingut la sort de veure aquestes montanyes i simplement. Espectaculars!!!7 al igual que les teves croniques!!

Fran dijo...

Hola David G.

Efectivamente, es el "Le Grata Pes".
Está nuevo y teníamos para nosotros solos una habitación de 6.
No hay tele, pero lo que sí que tiene es una nevera llena de cervezas y refrescos (a 1,50 euros).

Las camas son muy cómodas.
La cena incluida es en el restaurante del pueblo y nosotros cenamos muy bien. Son muy lentos pero se cena bien.

El desayuno es en el albergue y es a base de pas tostado, mantequilla, mermelada, café, zumo y poca cosa más.

Si tienes alguna duda más, contacta conmigo en el correo del equipo:
ccmacoterrassa@gmail.com

Un abrazo

Fran